Para atraer más consumidores, los minoristas dan consejos de nutrición
Por Timothy W. Martin e Ilan Brat
Myra Vanderpool llevaba años comprando el pan integral de marca propia de su supermercado local. Hace unos meses, cambió de marca.
Su decisión fue motivada por un nuevo sistema de puntaje nutricional en período de prueba en Kroger Co. en Lexington, Kentucky, el supermercado que frecuenta. El sistema califica a miles de alimentos en una escala de 1 (bajo en nutrición) a 100 (muy sano). Los resultados, colocados al lado de los productos, fueron sorprendentes: su pan regular recibió 23 puntos, igual que el helado de café de Häagen-Dazs.
Así que la profesora de 67 años comenzó a comprar pan integral de Nature's Own, con 81 puntos, en parte porque contiene más fibra y proteína que su antigua marca. Su esposo echa de menos el otro pan y se queja, pero ella le dice: "Es más sano para ti".
El sistema de Kroger forma parte de una estrategia de las cadenas estadounidenses de supermercados para ofrecer más consejos nutricionales a sus clientes.
Otras empresas, como Hy-Vee Inc., están contratando a nutricionistas para asesorar a los consumidores sobre cómo seleccionar alimentos más sanos en sus tiendas. Wal-Mart Stores Inc., la mayor cadena de alimentos del país y el mayor minorista del mundo, planea anunciar pronto detalles de su propio "programa de nutrición", indica una portavoz.
Los supermercados esperan incrementar la lealtad de sus clientes, y quizás reconquistar a algunos consumidores que pasaron a hacer sus compras en tiendas especializadas en productos orgánicos o en grandes minoristas de descuento como Wal-Mart. Las ventas de alimentos naturales y orgánicos en Estados Unidos subieron 72%, a US$31.900 millones, en los cinco años finalizados en 2009, mientras que los alimentos funcionales o fortificados, aumentaron 44%, a US$37.300 millones, en el mismo período, según la publicación especializada Nutrition Business Journal.
"No es nuestra responsabilidad decirles a los compradores qué comer, qué no comer o cómo comer", señala Ric Jurgens, presidente ejecutivo de Hy-Vee. No obstante, "necesitamos proporcionarles toda la información que podamos, para ayudarlos a tomar buenas decisiones y ofrecerles la mayor cantidad de opciones posible".
Algunos fabricantes de alimentos se oponen a que califiquen sus productos en base a la nutrición, afirmando que los consumidores consideran una serie de factores cuando compran alimentos. Además, afirman que confiar en un único puntaje nutricional puede minar los esfuerzos de los consumidores para entender cómo encajan los alimentos que compran en una dieta.
Kroger, la segunda mayor cadena de supermercados por facturación de EE.UU. detrás de Wal-Mart, comenzó a probar el sistema de puntaje NuVal en algunas tiendas en Kentucky y estudia usarlo en el resto del país. El sistema, desarrollado por expertos en salud de la Universidad de Yale y de otras instituciones, usa datos nutricionales en las etiquetas de los alimentos y otra información pública para calcular cómo un producto satisface las recomendaciones de nutrición de las autoridades de salud. Los altos niveles de grasas saturadas, por ejemplo, disminuyen el puntaje, mientras que el calcio lo eleva.
Los minoristas pagan una comisión para recibir la licencia de uso del sistema de puntaje de NuVal LLC, propiedad de Griffin Hospital en Derby, Connecticut, y de la cooperativa de supermercados regionales Topco Associates LLC. El hospital posee el algoritmo sobre el que se basa el sistema y sólo lo puede modificar un panel compuesto por siete expertos en salud y nutrición de varias universidades.
Los creadores del sistema NuVal afirman que la ventaja del sistema es principalmente mostrar cómo una marca o variedad de un producto puede ser más nutritiva que otra.
Aunque varios fabricantes de alimentos no están de acuerdo con el sistema de NuVal, el puntaje puede influir en las elecciones de los compradores. Ron Gill, un vendedor de seguros de Lexington, Kentucky, sigue de cerca la calificación NuVal expuesta en el supermercado Kroger que frecuenta. En una reciente visita, Gill dejó de lado su marca habitual de salchichas, Ball Park, de Sara Lee Corp., con 7 puntos. En su lugar, escogió las salchichas ahumadas de pavo de Johnsonville Sausage LLC, con un puntaje de 10.
"Es una diferencia pequeña, pero en la dirección correcta", dijo Gill.
Una portavoz de Sara Lee señaló en un comunicado que otros productos Ball Park tienen un puntaje mayor en la escala NuVal.
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