En tiempos de Gripe, los cítricos suman defensas
El diario tucumano La Gaceta publicó una nota donde se aconseja una determinada dieta y ejercicios que ayudan a sumar defensas para resistir a las infecciones. Naranjas, limones y pomelos tienen propiedades antioxidantes y facilitan la cicatrización de heridas, entre otras virtudes. Alimentarse en forma inadecuada, vivir estresado, afrontar cambios bruscos de temperatura y no descansar bien son factores que debilitan el sistema inmunológico.
Pero algunos hábitos saludables ayudan a reforzar las defensas. Un cuerpo fuerte estará mejor preparado para enfrentar las infecciones causadas por virus, parásitos, hongos y bacterias que provienen del exterior o del propio organismo y, por supuesto, la gripe A.
Emilio Buabse, pediatra, infectólogo y profesor jubilado de la cátedra de Enfermedades Infecciosas de la UNT aseguró a LA GACETA que se puede fortalecer el sistema de defensas, no sólo para prevenir gripe o resfrío, sino para mejorar la salud en general. "Está demostrado que practicar ejercicios físicos o caminar 45 minutos diarios multiplica en sangre los linfocitos CD4, que aumentan las defensas del organismo", destacó el especialista.
Otro aspecto importante para gozar de buena salud es comer sano y en forma equilibrada. Es decir que en la dieta cotidiana no deben faltar leche, verduras, legumbres, frutas, carnes rojas y blancas (magras) y especialmente pescado.
También hay que consumir regularmente probióticos (productos lácteos fermentados, como yogur) y tomar suplementos minerales indicados por el médico nutricionista. Quienes beben con regularidad leches fermentadas presentan mayor resistencia a los microorganismos que provocan intoxicaciones alimentarias y un estado inmunológico más fuerte.
Imprescindibles
Para que las defensas no decaigan se deben consumir alimentos que contengan vitaminas y minerales. Las vitaminas del grupo B benefician el sistema nervioso y se hallan en la avena, el trigo, la cebada, los frutos secos y en verduras (rábano, lechuga, espinaca, coliflor) y en la levadura de cerveza.
La vitamina A beneficia la vista y la piel. Se encuentra en zanahorias, verdolaga, espárragos, albahaca, calabaza, coriandro, entre otros. La vitamina C ayuda en la absorción de las vitaminas A y E, del hierro, calcio y aminoácidos, tiene propiedades antioxidantes y facilita la cicatrización de heridas. Se encuentra en pimientos, cítricos (naranja, limón, pomelo) y en el escaramujo (fruto de la rosa silvestre). Por otra parte, Buabse dijo que la vacuna antigripal debería ser obligatoria en todos los grupos de riesgo: mayores de 65 años, pacientes con patologías de base o inmunocomprometidos (diabéticos, cardíacos, oncológicos, con HIV y trasplantados, entre otros), con males crónicos respiratorios como el asma, en menores de dos años y embarazadas,
"No puede ser que sólo el 20% de los cardíacos y el 7% de los diabéticos se vacunen contra la gripe", advirtió el infectólogo, y subrayó que la vacunación también debería estar más extendida entre el personal de la salud.
Pero algunos hábitos saludables ayudan a reforzar las defensas. Un cuerpo fuerte estará mejor preparado para enfrentar las infecciones causadas por virus, parásitos, hongos y bacterias que provienen del exterior o del propio organismo y, por supuesto, la gripe A.
Emilio Buabse, pediatra, infectólogo y profesor jubilado de la cátedra de Enfermedades Infecciosas de la UNT aseguró a LA GACETA que se puede fortalecer el sistema de defensas, no sólo para prevenir gripe o resfrío, sino para mejorar la salud en general. "Está demostrado que practicar ejercicios físicos o caminar 45 minutos diarios multiplica en sangre los linfocitos CD4, que aumentan las defensas del organismo", destacó el especialista.
Otro aspecto importante para gozar de buena salud es comer sano y en forma equilibrada. Es decir que en la dieta cotidiana no deben faltar leche, verduras, legumbres, frutas, carnes rojas y blancas (magras) y especialmente pescado.
También hay que consumir regularmente probióticos (productos lácteos fermentados, como yogur) y tomar suplementos minerales indicados por el médico nutricionista. Quienes beben con regularidad leches fermentadas presentan mayor resistencia a los microorganismos que provocan intoxicaciones alimentarias y un estado inmunológico más fuerte.
Imprescindibles
Para que las defensas no decaigan se deben consumir alimentos que contengan vitaminas y minerales. Las vitaminas del grupo B benefician el sistema nervioso y se hallan en la avena, el trigo, la cebada, los frutos secos y en verduras (rábano, lechuga, espinaca, coliflor) y en la levadura de cerveza.
La vitamina A beneficia la vista y la piel. Se encuentra en zanahorias, verdolaga, espárragos, albahaca, calabaza, coriandro, entre otros. La vitamina C ayuda en la absorción de las vitaminas A y E, del hierro, calcio y aminoácidos, tiene propiedades antioxidantes y facilita la cicatrización de heridas. Se encuentra en pimientos, cítricos (naranja, limón, pomelo) y en el escaramujo (fruto de la rosa silvestre). Por otra parte, Buabse dijo que la vacuna antigripal debería ser obligatoria en todos los grupos de riesgo: mayores de 65 años, pacientes con patologías de base o inmunocomprometidos (diabéticos, cardíacos, oncológicos, con HIV y trasplantados, entre otros), con males crónicos respiratorios como el asma, en menores de dos años y embarazadas,
"No puede ser que sólo el 20% de los cardíacos y el 7% de los diabéticos se vacunen contra la gripe", advirtió el infectólogo, y subrayó que la vacunación también debería estar más extendida entre el personal de la salud.
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